El terror de Sendero Luminoso en La Masacre de Lucanamarca

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El terror de Sendero Luminoso en La Masacre de Lucanamarca

Table of Contents

  1. Introducción
  2. El origen del Partido Comunista del Perú
  3. El inicio de la guerra popular en Ayacucho
  4. Sendero Luminoso y su impacto en el Perú
  5. La masacre de Bucanamarca: un ataque terrorista
  6. La llegada de Sendero Luminoso a Lucanamarca
  7. Los abusos y la organización de los pobladores
  8. El primer eslabón: la captura y muerte de Olegario Curitomay
  9. El ataque terrorista en Yanacolpa
  10. El asesinato brutal en la vivienda de Antonio Quincho
  11. El exterminio en el Paraje de Yahshua
  12. El intento de resistencia y la emboscada en el regreso al pueblo
  13. La masacre en Lucanamarca: hombres, mujeres y niños asesinados
  14. La huida de los senderistas y la ayuda de Epifiano Quispetacas
  15. Las secuelas y la búsqueda de justicia
  16. La identificación y exhumación de las víctimas
  17. El entierro y el cierre de un doloroso capítulo en Lucanamarca

La masacre de Lucanamarca: terror y tragedia en el Perú

El 17 de abril de 1983, en el distrito de Santiago de Lucanamarca, en la provincia de Huancasancos, Perú, se desencadenó una de las peores masacres realizadas por el grupo subversivo Sendero Luminoso. Esta masacre, conocida como la masacre de Lucanamarca, fue uno de los primeros ataques terroristas llevados a cabo por la organización en su búsqueda de causar terror y establecer su dominio en la región.

Introducción

En la década de 1980, el Partido Comunista del Perú (PCP) declaró la guerra popular en Ayacucho, marcando el inicio de una serie de masacres y actos de violencia que azotaron al país durante los años 80 y 90. Sendero Luminoso, una facción del PCP, se encargó de sembrar el terror en cada rincón de la sierra peruana, siendo la masacre de Lucanamarca uno de los eventos más desgarradores de esta época. En este artículo, exploraremos en detalle los acontecimientos que rodearon esta tragedia, desde el origen del partido hasta las consecuencias posteriores.

El origen del Partido Comunista del Perú

Antes de adentrarnos en la masacre de Lucanamarca, es importante comprender el contexto en el que se gestó el Partido Comunista del Perú. Fundado en 1928 por José Carlos Mariátegui, el partido buscaba establecer un sistema comunista en el país. Sin embargo, no fue hasta la década de 1970 que la facción liderada por Abimael Guzmán, conocida como Sendero Luminoso, ganó fuerza y comenzó a realizar acciones terroristas.

El inicio de la guerra popular en Ayacucho

En 1980, el PCP declaró la guerra popular en la región de Ayacucho, marcando el inicio de una serie de ataques y actos de violencia por parte de Sendero Luminoso. La organización buscaba instaurar un gobierno comunista a través de la lucha armada y el terror. Esta guerra se extendió por todo el país, causando miles de muertos y destrozando comunidades enteras.

Sendero Luminoso y su impacto en el Perú

Sendero Luminoso se instaló en la región de Huancasancos en los años 70, llevando a cabo labores de proselitismo a través del Colegio Los Andes en la capital de la provincia. Aprovechando la presencia de profesores formados en la Universidad Nacional San Cristóbal de Huamanga, Sendero Luminoso logró reclutar a jóvenes y niños, obligándolos a participar en sus actividades terroristas.

La masacre de Bucanamarca: un ataque terrorista

La masacre de Bucanamarca fue uno de los primeros ataques terroristas llevados a cabo por Sendero Luminoso. Con la llegada de los camaradas Oscar y Karda en 1982 a Lucanamarca, se realizaron asambleas en las cuales nombraron a los hermanos Olegario Curitomay, Nicanor Curitomay y Gilbert Curitomay como mandos senderistas locales. A medida que más integrantes se unieron al grupo, comenzaron los abusos contra la población, lo que llevó a los pobladores a organizarse para enfrentarse a los terroristas.

La llegada de Sendero Luminoso a Lucanamarca

En 1983, Sendero Luminoso llegó oficialmente a Lucanamarca, donde los pobladores los confundieron con miembros de las fuerzas del orden. Varios pobladores lograron escapar hacia las alturas del Cerro Calvario, mientras que los senderistas realizaron una asamblea en la plaza del pueblo. Allí, separaron a los varones adultos de las mujeres y niños, obligando a los hombres a tirarse al suelo frente a la iglesia mientras los demás eran retenidos en una esquina cercana al antiguo local municipal.

Los abusos y la organización de los pobladores

Los abusos perpetrados por Sendero Luminoso en Lucanamarca llevaron a los pobladores a organizar una resistencia contra los terroristas. Sin embargo, diez comuneros fueron asesinados en manos de los subversivos. Curiosamente, algunos familiares de Gilbert Curitomay, uno de los líderes de Sendero Luminoso, lograron escapar ilesos en circunstancias extrañas.

El primer eslabón: la captura y muerte de Olegario Curitomay

El primer eslabón que dio paso a la masacre de Lucanamarca fue la captura y muerte de Olegario Curitomay, hermano de Gilbert Curitomay. Olegario fue capturado por los pobladores y golpeado brutalmente antes de ser incendiado y finalmente asesinado de un disparo. Este acto de violencia desencadenó una cadena de eventos que culminó en la masacre.

El ataque terrorista en Yanacolpa

El 3 de abril de 1983, un grupo de aproximadamente 60 terroristas de Sendero Luminoso se dirigieron a Yanacolpa armados con hachas, machetes, cuchillos y armas de fuego. Capturaron a varios campesinos, incluyendo a Antonio Quincho y su familia, a quienes reunieron en una vivienda donde fueron brutalmente asesinados con hachas, machetes y armas de fuego.

El asesinato brutal en la vivienda de Antonio Quincho

El grupo de terroristas de Sendero Luminoso llegó a la vivienda de Antonio Quincho en Yanacolpa, donde se encontraba junto a otras personas capturadas en instancias vecinas. Un total de 29 personas, entre hombres, mujeres y niños, fueron encerradas en la vivienda y asesinadas brutalmente con hachas, machetes y armas de fuego. Los cuerpos de las víctimas quedaron amontonados en el suelo, representando una imagen horripilante de la masacre.

El exterminio en el Paraje de Yahshua

Después del ataque en la vivienda de Antonio Quincho, los senderistas continuaron su camino hacia Lucanamarca. En el paraje de Yahshua, exterminaron a otras ocho personas. Rolando Misaiko Emanan, uno de los sobrevivientes, logró escapar junto a su hermana gracias a encontrarse en ese momento lavando ropa en el río. Al regresar a su hogar, encontraron a su hermano y a su madre muertos, víctimas de la masacre.

El intento de resistencia y la emboscada en el regreso al pueblo

Después del exterminio en el Paraje de Yahshua, los senderistas se prepararon para proceder de igual forma con un segundo grupo de hombres y mujeres que habían capturado. Sin embargo, un niño llamado Epifiano Quispetacas alertó a gritos sobre una supuesta llegada de las fuerzas del orden. Al escuchar esto, los senderistas se retiraron del lugar sin antes saquear y quemar el local municipal y algunas viviendas.

La masacre en Lucanamarca: hombres, mujeres y niños asesinados

Una vez dentro de Lucanamarca, los senderistas invocaron a una asamblea en la plaza del pueblo. Allí, separaron a los varones adultos de las mujeres y los niños. Los varones fueron obligados a tirarse al piso frente a la iglesia, mientras que las mujeres y los niños fueron retenidos en una esquina cercana. Los subversivos asesinaron uno a uno a los hombres con machetes, hachas y armas de fuego, mientras las mujeres observaban horrorizadas y esperando su turno.

La huida de los senderistas y la ayuda de Epifiano Quispetacas

Ante la llegada de los senderistas, varios pobladores escaparon hacia las alturas del Cerro Calvario en busca de protección. Otros intentaron resistir a los terroristas a través de ondas, pero sus intentos fueron inútiles ante las armas de fuego de los senderistas. Epifiano Quispetacas, el niño que alertó sobre la supuesta llegada de las fuerzas del orden, se convirtió involuntariamente en un salvador al contribuir a la retirada de los senderistas del lugar.

Las secuelas y la búsqueda de justicia

Después de la masacre, los sobrevivientes quedaron marcados por el horror presenciado y vivido en Lucanamarca. El miedo y la desconfianza se apoderaron de la comunidad, y la búsqueda de justicia se convirtió en una lucha constante. Durante años, las víctimas y sus familiares clamaron por el esclarecimiento de lo sucedido y la identificación de los responsables.

La identificación y exhumación de las víctimas

Casi 20 años después de la masacre, en el año 2002, se llevó a cabo la identificación y exhumación de los restos de las víctimas en Lucanamarca. La Unidad de Investigación Forense y la Fiscalía Provincial Mixta de Huancasancos realizaron una exhaustiva investigación para recabar información que permitiera la correcta identificación de los cuerpos. Se identificaron ocho sitios de enterramiento, donde se encontraban los restos de las víctimas.

El entierro y el cierre de un doloroso capítulo en Lucanamarca

El 10 de enero de 2003, finalmente se realizó la entrega de los restos de las víctimas a sus familiares en una ceremonia de entierro en el camposanto "3 de abril" en Lucanamarca. Esta entrega marcó el cierre simbólico de un doloroso capítulo en la historia del pueblo. Las familias pudieron despedirse de sus seres queridos y comenzar a curar las heridas que los atormentaron durante más de dos décadas. Sin embargo, el dolor y la memoria de lo sucedido perdurarán en la comunidad de Lucanamarca por generaciones.

Highlights

  • La masacre de Lucanamarca: un brutal ataque terrorista perpetrado por Sendero Luminoso.
  • El origen del Partido Comunista del Perú y su objetivo de establecer un sistema comunista en el país.
  • La guerra popular en Ayacucho y el inicio de la violencia desatada por Sendero Luminoso.
  • El impacto devastador de Sendero Luminoso en el Perú y la instalación del grupo en Huancasancos.
  • El primer eslabón de la masacre: la captura y muerte de Olegario Curitomay, hermano de uno de los líderes de Sendero Luminoso.
  • La masacre en Yanacolpa: el brutal asesinato de campesinos, incluyendo a Antonio Quincho y su familia.
  • El intento de resistencia de los pobladores y la emboscada en el regreso al pueblo.
  • La masacre en Lucanamarca: hombres, mujeres y niños asesinados en un acto de violencia sin piedad.
  • La identificación y exhumación de los restos de las víctimas después de casi 20 años.
  • El entierro y el cierre de un doloroso capítulo en Lucanamarca.

Preguntas frecuentes (FAQ)

¿Quiénes fueron los responsables de la masacre de Lucanamarca?

La masacre fue perpetrada por miembros de Sendero Luminoso, una facción del Partido Comunista del Perú liderada por Abimael Guzmán.

¿Cuál fue el objetivo de Sendero Luminoso al llevar a cabo la masacre?

Sendero Luminoso buscaba sembrar el terror y establecer su dominio en la región de Huancasancos, así como en todo el Perú. La masacre de Lucanamarca fue uno de los muchos actos de violencia llevados a cabo por el grupo en su búsqueda de lograr sus objetivos.

¿Cuántas personas perdieron la vida en la masacre de Lucanamarca?

Un total de 69 personas, entre hombres, mujeres y niños, perdieron la vida en la masacre de Lucanamarca.

¿Se logró justicia para las víctimas de la masacre?

Si bien se han realizado avances en la investigación y se logró la identificación de los restos de las víctimas, aún persisten desafíos en la búsqueda de justicia. Muchos responsables de la masacre aún no han sido llevados ante la justicia.

¿Cómo ha afectado la masacre a la comunidad de Lucanamarca?

La masacre dejó heridas profundas en la comunidad de Lucanamarca. El miedo, la desconfianza y el dolor perduran hasta hoy. Sin embargo, el pueblo ha mostrado resiliencia y ha trabajado para superar las secuelas de este trágico evento.

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